El trabajador que considere que su despido es ilegal puede demandar laboralmente en el plazo de 60 días hábiles, contados desde la separación de su trabajo. Si el trabajador interpone un reclamo en la Dirección del Trabajo el plazo antes referido se suspende hasta por 90 días hábiles contados desde la separación del trabajador.

Lo es cuando los hechos que argumentan el despido son falsos, infundados y no encuentran sustento en el marco legal.

Es el término de la relación laboral estando impagas las cotizaciones previsionales. Un despido que no cuente con esto significa que el despido es nulo, y que proceden las sanciones legales conocidas como Ley Bustos.

Cuando el empleador incumple gravemente el contrato de trabajo (no pago de sueldo, no pago de cotizaciones, no otorgamiento de trabajo, no respetar jornadas ni descansos, etc.) el trabajador puede autodespedirse. Para lo anterior, el trabajador tiene que enviar una carta de autodespido al empleador y a la Dirección del Trabajo indicando los hechos que constituyen el incumplimiento del empleador. Enviadas las cartas, se puede presentar la demanda judicial en Tribunales, y así iniciar el procedimiento laboral por autodespido. A contar de la fecha de envío de la carta, no tienes que presentarte a trabajar.

Sí, y podemos solicitar el reembolso del descuento que realiza el empleador por concepto de AFC o seguro de cesantía.

La ley prohíbe todo tipo de discriminación y de vulneración de garantías constituciones o de derechos consagrados en la Constitución. Cuéntanos tu caso y nosotros podemos representarte en un procedimiento especial llamado tutela laboral.

Un accidente de trabajo es el evento que genera un perjuicio en la salud del trabajador, que sucede durante su jornada laboral o bien en el trayecto al trabajo o desde el trabajo a su casa.

Si el accidente laboral tiene como causa la infracción del deber de seguridad del empleador, tú, con nuestra asesoría legal, puedes demandar a tu empleador para que lo indemnicen por todos los perjuicios experimentados, ya sean daños físicos, sicológicos (daño moral), etc., consecuencia del accidente laboral.